PASTOR Y CONSEJERO

Kike Torres

VERSÍCULOS

PARA TEMAS DE CONSEJERÍA

MIEDO/PÁNICO O SITUACIONES QUE NOS SUPERAN

Josué 1:9 TLA

Yo te pido que seas fuerte y valiente, que no te desanimes ni tengas miedo, porque yo soy tu Dios, y te ayudaré por dondequiera que vayas.

Job 11:18 NTV

Tener esperanza te dará valentía. Estarás protegido y descansarás seguro.

 

1ª Samuel 30:6-7 TLA

Los hombres estuvieron a punto de apedrear a David, pues le echaban la culpa de que los amalecitas se hubieran llevado a sus mujeres y a sus hijos. Sin embargo, David confiaba en que Dios podía ayudarlo, así que se animó y le dijo al sacerdote Abiatar, el hijo de Ahimélec: «Tráeme tu chaleco sacerdotal. Voy a consultar con Dios qué es lo que debo hacer»

Salmo 3:3 NBLA

Pero Tú, oh Señor, eres escudo en derredor mío,
Mi gloria, y el que levanta mi cabeza.

Salmo 5:3 NBLA

Oh Señor, de mañana oirás mi voz; De mañana presentaré mi oración a Ti, Y con ansias esperaré.

Salmo 5:4 NBLA

Porque Tú no eres un Dios que se complace en la maldad; El mal no mora en Ti.

Salmo 5:5 NBLA

Los que se ensalzan no estarán delante de Tus ojos; Aborreces a todos los que hacen iniquidad.

Salmo 5:12 NBLA

Porque Tú, oh Señor, bendices al justo, Como con un escudo lo rodeas de Tu favor.

Salmo 16:1 NBLA

Protégeme, oh Dios, pues en Ti me refugio.

Salmo 28:6-7 THE MESSAGE

Blessed be God — he heard me praying. He proved he’s on my side; I’ve thrown my lot in with him. Now I’m jumping for joy, and shouting and singing my thanks to him.

Salmo 34:4 NTV

Oré al Señor, y él me respondió; me libró de todos mis temores.

Salmo 34:4-6 TLA

Le pedí a Dios que me ayudara, y su respuesta fue positiva: ¡me libró del miedo que tenía! Los que a él acuden se llenan de alegría y jamás pasan vergüenzas. Yo, que nada valgo, llamé a Dios, y él me oyó, y me salvó de todas mis angustias.

Salmo 46:1-3 NBLA

Dios es nuestro refugio y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos aunque la tierra sufra cambios, Y aunque los montes se deslicen al fondo de los mares; Aunque bramen y se agiten sus aguas, Aunque tiemblen los montes con creciente enojo. (Selah)

Salmo 49:4-5 NBLA

Inclinaré al proverbio mi oído, Con el arpa declararé mi enigma. ¿Por qué he de temer en los días de adversidad Cuando la iniquidad de mis enemigos me rodee,

Salmo 50:22 NBLA

Entiendan ahora esto ustedes, los que se olvidan de Dios, No sea que los despedace, y no haya quien los libre.

Salmo 56:3-4 NBLA

El día en que temo, Yo en Ti confío. En Dios, cuya palabra alabo, En Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?

Salmo 56:3 NTV

Pero cuando tenga miedo, en ti pondré mi confianza.

Salmo 56:9-11 NBLA

Entonces mis enemigos retrocederán el día en que yo te invoque. Esto sé: que Dios está a favor mío. En Dios, cuya palabra alabo, En el Señor, cuya palabra honro; En Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?

Salmo 56:9 NTV

Mis enemigos emprenderán la retirada cuando yo clame a ti por ayuda. Una cosa sé: ¡Dios está de mi lado!

Salmo 56:13 NBLA

Pues Tú has librado mi alma de la muerte, Y mis pies de tropiezo, Para que yo pueda andar delante de Dios En la luz de la vida.

Salmo 57:3 NBLA

Él enviará desde los cielos y me salvará; Él reprocha al que me pisotea. (Selah) Dios enviará Su misericordia y Su verdad.

Salmo 63:7-8 TLA

¡Tú eres quien me ayuda! ¡Soy feliz bajo tu protección! ¡A ti me entrego por completo, porque tu gran poder es mi apoyo!

Salmo 78:9-12 TLA

Los israelitas eran buenos guerreros, pero se acobardaron y no entraron en batalla. No cumplieron su compromiso con Dios, ni siguieron sus enseñanzas. Cuando estaban en Egipto, en la región de Soan, vieron las grandes maravillas que Dios realizó ante sus ojos, pero no las tomaron en cuenta.

Salmo 78:42-43 TLA

No se acordaron del día cuando Dios, con su poder, los libró de sus enemigos. Tampoco recordaron los grandes milagros que Dios hizo en Egipto

Salmo 93:4-5 NTV

Pero más poderoso que el estruendo de los mares enfurecidos, más potente que las rompientes olas en la orilla, el Señor, quien está en lo alto, es más poderoso que estos. Tus leyes soberanas no pueden ser modificadas; tu reino, oh Señor, es santo por siempre y para siempre.

Salmo 112:7-8 NBLA

No temerá recibir malas noticias; Su corazón está firme, confiado en el Señor. Su corazón está seguro, no temerá, Hasta que vea vencidos a sus adversarios.

Salmo 119:143 NTV

Cuando la presión y el estrés se me vienen encima, yo encuentro alegría en tus mandatos.

Proverbios 1:33 TLA

Pero los que me hagan caso vivirán tranquilos y en paz, y no tendrán miedo del mal.

Proverbios 3:21-26 NBLA

Hijo mío, no se aparten estas cosas de tus ojos; Guarda la prudencia y la discreción, Y serán vida para tu alma Y adorno para tu cuello. Entonces andarás con seguridad por tu camino, Y tu pie no tropezará. Cuando te acuestes no tendrás temor, Sí, te acostarás y será dulce tu sueño. No temerás el pavor repentino, Ni el ataque de los impíos cuando venga, Porque el Señor será tu confianza, Y guardará tu pie de ser apresado.

Proverbios 3:34 NBLA

Ciertamente Él se burla de los burladores, Pero da gracia a los afligidos.

Proverbios 20:24 TLA

Nadie sabe cuál será su futuro; por eso debemos dejar que Dios dirija nuestra vida.

Jeremías 17:17 TLA

Cuando estoy en peligro, tú me proteges. ¡No dejes que el miedo se apodere de mí!

Mateo 6:26 NBLA

Miren las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No son ustedes de mucho más valor que ellas?

Mateo 6:27 NBLA

¿Quién de ustedes, por ansioso que esté, puede añadir una hora al curso de su vida? 

Mateo 6:31-32 NBLA

Por tanto, no se preocupen, diciendo: “¿Qué comeremos?” o “¿qué beberemos?” o “¿con qué nos vestiremos?”. Porque los gentiles buscan ansiosamente todas estas cosas; que el Padre celestial sabe que ustedes necesitan todas estas cosas.

Juan 14:27-29 TLA

Les doy la paz, mi propia paz, que no es como la paz que se desea en este mundo. No se preocupen ni tengan miedo por lo que pronto va a pasar. Ustedes me oyeron decir que me voy, pero regresaré por ustedes. Y si en verdad me amaran, deberían estar alegres de esto, porque voy a regresar a donde está mi Padre, y él es mayor que yo.

Les digo todo esto desde ahora para que, cuando suceda, confíen en mí.

DEPRESIÓN

1ª Reyes 19:4 NBLA

y anduvo por el desierto un día de camino, y vino y se sentó bajo un arbusto; pidió morirse y dijo: «Basta ya, Señor, toma mi vida porque yo no soy mejor que mis padres».

1ª Reyes 19:6-8 NBLA

Entonces vio que en su cabecera había una torta cocida sobre piedras calientes y una vasija de agua. Comió y bebió, y volvió a acostarse. El ángel del Señor volvió por segunda vez, lo tocó y le dijo: «Levántate, come, porque es muy largo el camino para ti». Se levantó, pues, y comió y bebió, y con la fuerza de aquella comida caminó cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb, el monte de Dios.

1ª Samuel 22:7-8 TLA

Les dijo a sus oficiales: —Ustedes, los de la tribu de Benjamín, oigan bien lo que voy a decirles. ¿Por qué me han traicionado? Díganme si David les ha prometido darles campos y viñedos, o hacerlos jefes de su ejército.

»Si no lo ha hecho, ¿por qué nadie me advirtió que mi hijo se puso de parte de David y le ayudó a rebelarse contra mí? ¿Por qué nadie se preocupa por mí?

2ª Samuel 13:4-6 TLA

Un día, Jonadab le dijo a Amnón: —Dime, ¿por qué cada día te noto más decaído? ¿Si eres el hijo del rey, qué te puede faltar?

Y Amnón le contestó: —Es que estoy enamorado de Tamar, ¡y es mi media hermana!

Jonadab le aconsejó: —Pues métete en la cama, y haz como si estuvieras muy enfermo. Y cuando tu padre venga a verte, pídele que mande a tu hermana Tamar. Dile que necesitas a alguien que te prepare la comida y te la dé en la boca.

Amnón fue entonces a acostarse, fingiéndose muy enfermo. Cuando el rey llegó a visitarlo, Amnón le dijo: —Por favor, deja que mi hermana Tamar venga a prepararme unos panes y me dé a comer en la boca.

Jeremías 45:3-5 NBLA

“Tú dijiste: ‘¡Ay, infeliz de mí!, porque el Señor ha añadido tristeza a mi dolor. Cansado estoy de gemir y no he hallado reposo’”. Así le dirás: “Así dice el Señor: ‘Lo que he edificado, lo derribo, y lo que he plantado, lo arranco, es decir, toda esta[a] tierra’. Pero tú, ¿buscas para ti grandes cosas? No las busques; porque voy a traer calamidad sobre toda carne”, declara el Señor, “pero a ti te daré tu vida por botín en todos los lugares adonde vayas”»

Lamentaciones 3:20-25 NTV

Siempre tengo presente este terrible tiempo mientras me lamento por mi pérdida. No obstante, aún me atrevo a tener esperanza cuando recuerdo lo siguiente: ¡El fiel amor del Señor nunca se acaba! Sus misericordias jamás terminan.
Grande es su fidelidad; sus misericordias son nuevas cada mañana. Me digo: «El Señor es mi herencia, por lo tanto, ¡esperaré en él!». El Señor es bueno con los que dependen de él, con aquellos que lo buscan.

Eclesiastés 7:3 TLA

Más vale llorar que reír; el llanto nos hace madurar.

Oseas 10:8 NTV

Y los santuarios paganos de Avén,[a] donde Israel pecaba, se derrumbarán. Alrededor de sus altares crecerán espinos y cardos. Suplicarán a los montes: «¡Entiérrennos!», y rogarán a las colinas: «¡Caigan sobre nosotros!».

Salmo 12:5 NBLA

«Por la desolación del afligido, por los gemidos del menesteroso, Me levantaré ahora», dice el Señor; «lo pondré en la seguridad que anhela».

Salmo 13:5 LBLA

Mas yo en tu misericordia he confiado; mi corazón se regocijará en tu salvación.

Salmo 18:3 THE MESSAGE

I sing to God, the Praise-Lofty, and find myself safe and saved.

Salmo 18:30 THE MESSAGE

What a God! His road stretches straight and smooth. Every God-direction is road-tested. Everyone who runs toward him makes it.

Salmo 46:1-3 NBLA

Dios es nuestro refugio y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. Por tanto, no temeremos aunque la tierra sufra cambios, Y aunque los montes se deslicen al fondo de los mares; Aunque bramen y se agiten sus aguas, Aunque tiemblen los montes con creciente enojo. (Selah)

Salmo 49:4-5 NBLA

Inclinaré al proverbio mi oído, Con el arpa declararé mi enigma. ¿Por qué he de temer en los días de adversidad Cuando la iniquidad de mis enemigos me rodee,

Salmo 50:22 NBLA

Entiendan ahora esto ustedes, los que se olvidan de Dios, No sea que los despedace, y no haya quien los libre.

Salmo 56:3-4 NBLA

El día en que temo, Yo en Ti confío. En Dios, cuya palabra alabo, En Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?

Salmo 21:6 TLA

Nunca dejas de bendecirlo; tu presencia lo llena de alegría.

Salmo 22:14-15 TLA

Me he quedado sin fuerzas, ¡estoy totalmente deshecho! ¡Mi corazón ha quedado
como cera derretida! Tengo reseca la garganta, y pegada la lengua al paladar; me dejaste tirado en el suelo, como si ya estuviera muerto.

Salmo 27:13 NBLA

Hubiera yo desmayado, si no hubiera creído que había de ver la bondad del Señor en la tierra de los vivientes.

Salmo 27:13 RVR60

Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová en la tierra de los vivientes.

Salmo 30:11 NTV

Tú cambiaste mi duelo en alegre danza; me quitaste la ropa de luto y me vestiste de alegría

Salmo 38:13-15 NBLA

Pero yo, como el sordo, no oigo; Soy como el mudo que no abre la boca. Sí, soy como el hombre que no oye, Y en cuya boca no hay réplica. Porque en Ti espero, oh Señor; Tú responderás, Señor, Dios mío.

Salmo 40:1-4 NBLA

Esperé pacientemente al Señor, Y Él se inclinó a mí y oyó mi clamor. Me sacó del hoyo de la destrucción, del lodo cenagoso; Asentó mis pies sobre una roca y afirmó mis pasos. Puso en mi boca un cántico nuevo, un canto de alabanza a nuestro Dios.
Muchos verán esto, y temerán Y confiarán en el Señor. Cuán bienaventurado es el hombre que ha puesto en el Señor su confianza, Y no se ha vuelto a los soberbios ni a los que caen en falsedad.

Salmo 42:5-6 THE MESSAGE

Why are you down in the dumps, dear soul? Why are you crying the blues?
Fix my eyes on God— soon I’ll be praising again. He puts a smile on my face. He’s my God. When my soul is in the dumps, I rehearse everything I know of you, From Jordan depths to Hermon heights, including Mount Mizar.

Salmo 69:20 TLA

Cuando escucho sus ofensas, se me rompe el corazón; ¡no tengo ánimo para nada!
Esperaba hallar apoyo y consuelo, y no los recibí;

Salmo 70:5 NBLA

Pero yo estoy afligido y necesitado; Oh Dios, ven pronto a mí. Tú eres mi ayuda y mi libertador; Señor, no te tardes.

Salmo 77:3-9 TLA

Cuando pienso en Dios, me siento desalentado y me dan ganas de llorar. ¡Dios me hace perder el sueño! ¡Estoy tan confundido que no sé qué decir! Por las noches me pongo a pensar; recuerdo los tiempos pasados, los años que se han ido, y entonces me pregunto: «¿Estará rechazándonos Diosde una vez y para siempre? ¿Habrá dejado de amarnos? ¿Tan enojado está con nosotros que ya no nos tiene compasión? ¿Dejará de tratarnos con bondad? ¿Se habrán agotado las promesas que se comprometió a cumplir? ¿Se habrá olvidado de que es un Dios bueno?»

Salmo 86:1 NBLA

Inclina, oh Señor, Tu oído y respóndeme, Porque estoy afligido y necesitado.

Salmo 86:4 NBLA

Alegra el alma de Tu siervo, Porque a Ti, oh Señor, elevo mi alma.

Salmo 86:9 NBLA

Todas las naciones que Tú has hecho vendrán y adorarán delante de Ti, Señor, Y glorificarán Tu nombre.

Salmo 102:4-7 NBLA

Mi corazón ha sido herido como la hierba y se ha secado, Y hasta me olvido de comer mi pan. A causa de la intensidad de mi gemido Mis huesos se pegan a la piel. Me parezco al pelícano del desierto; Como el búho de las soledades he llegado a ser. No puedo dormir; Soy cual pájaro solitario sobre un tejado.

Salmo 102:11 NBLA

Mis días son como sombra que se alarga; Y yo me seco como la hierba.

Salmo 102:18 NBLA

Esto se escribirá para las generaciones futuras, Para que un pueblo aún por crear alabe al Señor.

Salmo 119:89-93 TLA

Dios mío, tú eres eterno y siempre fiel. Mientras el cielo y la tierra existan,
tu palabra permanecerá; ¡todo lo creado está a tu servicio! Si tu palabra no me hiciera tan feliz, ¡ya me hubiera muerto de tristeza! Jamás me olvido de tu palabra,
pues ella me da vida.

Salmo 142:4-7 NBLA

Mira a la derecha, y ve, Porque no hay quien me tome en cuenta; No hay refugio para mí; No hay quien cuide de mi alma. A Ti he clamado, Señor; Dije: «Tú eres mi refugio, Mi porción en la tierra de los vivientes. Atiende a mi clamor, Porque estoy muy abatido; Líbrame de los que me persiguen, Porque son más fuertes que yo. Saca mi alma de la prisión, Para que yo dé gracias a Tu nombre; Los justos me rodearán, Porque Tú me colmarás de bendiciones».

Salmo 143:4-6 TLA

Ya no siento latir mi corazón; ¡ya he perdido el ánimo!

Me vienen a la mente los tiempos pasados y me pongo a pensar en todas tus acciones; ¡tengo muy presente todo lo que has hecho! ¡Hacia ti extiendo mis manos, pues me haces falta, como el agua a la tierra seca!

Salmo 145:5 NTV

Meditaré en la gloria y la majestad de tu esplendor, y en tus maravillosos milagros.

Salmo 145:15-20 NTV

Los ojos de todos buscan en ti la esperanza; les das su alimento según la necesidad. Cuando abres tu mano, sacias el hambre y la sed de todo ser viviente. El Señor es justo en todo lo que hace; está lleno de bondad. El Señor está cerca de todos los que lo invocan, sí, de todos los que lo invocan de verdad. Él concede los deseos de los que le temen; oye sus gritos de auxilio y los rescata. El Señor protege a todos los que lo aman, pero destruye a los perversos.

Proverbios 18:14 TLA

Con ánimo se alivia al enfermo, pero no a quien está deprimido.

Proverbios 18:14 THE MESSAGE

A healthy spirit conquers adversity, but what can you do when the spirit is crushed?

Mateo 15:25 NBLA

Pero acercándose ella, se postró[k] ante Él, diciendo: «¡Señor, ayúdame!».

Lucas 11:34 TLA

Los ojos de una persona son como una lámpara que alumbra su cuerpo. Por eso, si miran con ojos sinceros y amables, la luz entrará en su vida. Pero si sus ojos son envidiosos y orgullosos, vivirán en completa oscuridad.

Juan 16:22 TLA

Del mismo modo, ahora ustedes están tristes, pero yo volveré a verlos, y se pondrán tan felices que ya nadie les quitará esa alegría.

2ª Corintios 4:16-18 THE MESSAGE

So we’re not giving up. How could we! Even though on the outside it often looks like things are falling apart on us, on the inside, where God is making new life, not a day goes by without his unfolding grace. These hard times are small potatoes compared to the coming good times, the lavish celebration prepared for us. There’s far more here than meets the eye. The things we see now are here today, gone tomorrow. But the things we can’t see now will last forever.

ANGUSTIA

1ª Samuel 17:11 NBLA

Cuando Saúl y todo Israel oyeron estas palabras del filisteo, se acobardaron y tuvieron gran temor.

1ª Samuel 30:6 RVR60

Y David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues todo el pueblo estaba en amargura de alma, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se fortaleció en Jehová su Dios.

Proverbios 1:33 LBLA

Pero el que me escucha vivirá seguro, y descansará, sin temor al mal.

Proverbios 3:24 BTX

Cuando te acuestes, no tendrás temor, Te acostarás, y tu sueño será dulce.

Proverbios 12:25 NBLA

La ansiedad en el corazón del hombre lo deprime, Pero la buena palabra lo alegra.

Proverbios 28:1 NBLA

El impío huye sin que nadie lo persiga, Pero los justos están confiados como un león.

Salmo 54:4 NBLA

Pero Dios es el que me ayuda; El Señor es el que sostiene mi alma.

Salmo 54:7 NBLA

Porque Él me ha librado de toda angustia, Y mis ojos han visto a mis enemigos derrotados.

Salmo 12:5 NBLA

«Por la desolación del afligido, por los gemidos del menesteroso, Me levantaré ahora», dice el Señor; «lo pondré en la seguridad que anhela».

Salmo 13:5 LBLA

Mas yo en tu misericordia he confiado; mi corazón se regocijará en tu salvación.

Salmo 18:3 THE MESSAGE

I sing to God, the Praise-Lofty, and find myself safe and saved.

Salmo 18:30 THE MESSAGE

What a God! His road stretches straight and smooth. Every God-direction is road-tested. Everyone who runs toward him makes it.

Salmo 55:16-19 NBLA

En cuanto a mí, a Dios invocaré, Y el Señor me salvará. Tarde, mañana y mediodía me lamentaré y gemiré, Y Él oirá mi voz. En paz redimirá mi alma de la guerra que hay contra mí, Pues son muchos los que están contra mí. Dios oirá y les responderá, Él, que reina desde la antigüedad, (Selah) Porque no hay cambio en ellos Ni temen a Dios.

Salmo 77:10-20 NBLA

Entonces dije: «Este es mi dolor: Que la diestra del Altísimo ha cambiado». Me acordaré de las obras del Señor; Ciertamente me acordaré de Tus maravillas antiguas. Meditaré en toda Tu obra, Y reflexionaré en Tus hechos. Santo es, oh Dios, Tu camino; ¿Qué dios hay grande como nuestro Dios? Tú eres el Dios que hace maravillas, Has hecho conocer Tu poder entre los pueblos. Con Tu brazo has redimido a Tu pueblo, A los hijos de Jacob y de José. (Selah) Las aguas te vieron, oh Dios, Te vieron las aguas y temieron, Los abismos también se estremecieron. Derramaron aguas las nubes, Tronaron los nubarrones, También Tus saetas centellearon por todos lados. La voz de Tu trueno estaba en el torbellino, Los relámpagos iluminaron al mundo, La tierra se estremeció y tembló. En el mar estaba Tu camino, Y Tus sendas en las aguas inmensas, Y no se conocieron Tus huellas. Como rebaño guiaste a Tu pueblo Por mano de Moisés y de Aarón.

Salmo 78:12-19 NBLA

Él hizo maravillas en presencia de sus padres, En la tierra de Egipto, en el campo de Zoán. Dividió el mar y los hizo pasar, Y contuvo las aguas como en un montón. Después los guió de día con la nube Y toda la noche con un resplandor de fuego. Partió las rocas en el desierto, Y les dio agua tan abundante como las profundidades del océano; Hizo salir corrientes de la peña E hizo descender aguas como ríos. Pero aún siguieron pecando contra Él, Rebelándose contra el Altísimo en el desierto. Y en sus corazones tentaron a Dios, Pidiendo comida a su gusto. Hablaron contra Dios, Y dijeron: «¿Podrá Dios preparar mesa en el desierto?

Salmo 116:4 TLA

Entonces le rogué a Dios que me salvara la vida.

Salmo 116:6 TLA

Que protege a los indefensos. Yo no tenía quien me defendiera, y él vino en mi ayuda.

Salmo 120:1 NBLA

En mi angustia clamé al Señor, Y Él me respondió.

Salmo 120:1 TLA

Dios mío, cuando me siento angustiado, te llamo y tú me respondes.

Una nueva vida

de cristo en adelante

Este libro es una excelente herramienta para poner en manos de un nuevo creyente — o de un viejo creyente — que necesite comenzar a transitar por el camino del discipulado fiel. El autor nos llevará a recordar que Dios, el Creador, tiene mucho que decir con respecto a nuestra vida hoy y hacia dónde quiere llevarla en el futuro.

Ya podemos dejar de esperar. Nos toca ahora empezar a conocer lo que hizo Cristo, hacer nuestro Su sacrificio y tener un nuevo y eterno comienzo.